¡Cómo pasa el tiempo! Volvemos a estar en Semana Santa, época de marcado sentir religioso, pero también por suerte gastronómico. Si estos días de penitencia os lo permiten, no dejéis de disfrutar de este delicioso postre tan típico en estas fechas: el arroz con leche.

Es este un postre con historia. Antiguamente solo degustado por las clases pudientes, se preparaba usando almendras, pechugas de pollo, arroz y azúcar. Poco a poco, con el abaratamiento de las especias, las clases más bajas simplificaron este plato para poder disfrutar de él. Es esta la receta que llega hasta nuestros días

Como vamos a ver es una receta muy sencilla, aunque como en todo plato la mano del cocinero es la que dará el toque perfecto. Veamos qué tal nos sale a nosotros. Necesitaremos los siguientes ingredientes:

– 1/2 kg de arroz

– 1/2 kg de azúcar

– 2 litros de leche

– corteza de un limón

– canela en rama

– y canela molida.

Como para tantas recetas, si usamos fuego y no la moderna vitrocerámica será más fácil conseguir el punto perfecto. En primer lugar lavamos y ponemos a cocer el arroz con un chorrito de agua. Remover bien con una cuchara de madera hasta que el agua se evapore. Se incorpora un litro de leche, la corteza de limón y la canela en rama, sin dejar de remover. Cuando rompa a hervir se baja el fuego, y se continua incorporando leche y azúcar  hasta que el arroz esté cocido.

Hay a quien gusta poner leche condensada, todo depende del dulzor que se desee. Cuando el arroz esté listo lo retiramos del fuego, y sacamos la corteza de limón y la canela en rama. Se pone en cuencos, se espolvorea con canela molida y se deja enfriar. Se puede poner en el frigorífico para degustarlo fresquito también.

Y con estos pasos tan sencillos, podremos disfrutar de un manjar de dioses, con el mismo sabor que la receta de nuestras abuelas. ¡Que aproveche!

 

Doesn’t time fly? We are in Easter once more, a time of deep religious feeling, but also, luckily for us, gastronomic. If these days of penance allow you to do so, do not miss enjoying this delicious dessert so typical in these days: rice pudding.

This is a dessert with a story. In the past, it was only eaten by the wealthy classes, and it was made using almonds, chicken breasts, rice, and sugar. Gradually, with the reduced price of spices, the lower classes simplified this dish to be able to taste it too. That is the  recipe that has been passed on to the present day.

As you will see, it is a very simple recipe, although as in any dish the hand of the cook will give it the perfect touch. Let’s see how it goes for us. We will need the following ingredients:

– 1/2 kg of rice

– 1/2 kg of sugar

– 2 litres of milk

-Lemon peel (1 lemon)

– Stick cinnamon

– And ground cinnamon.

As for so many other recipes, if we use a traditional cooker and not the modern cooktop it will be easier to obtain the perfect point. First we wash and cook the rice with a trickle of water. Stir it with a wooden spoon until the water evaporates. Add one litre of milk, the lemon peel and the stick cinnamon, without stopping stirring. When it starts to boil turn the fire off, and keep on adding milk and sugar until the rice is cooked.

Some people like to add condensed milk, it all depends on how much sweetness you want. When the rice is ready we remove it from the heat, and take off the lemon peel and the stick cinnamon. Put the pudding in bowls, sprinkle it with ground cinnamon and let it cool. You can put  the bowls in the fridge to taste it cold too.

And with these simple steps, we will be have nectar of the gods, with the same flavor as our grandmothers’ recipe. Bon appetit!